
Desde hace unas semanas voy compartiendo en mi página de Facebook y en mi perfil de Instagram uan serie de fortalezas mentales ordenadas según el abecedario. La idea que me motivó fue que estamos en el mundo para progresar, para crecer, para ser mejores personas. Días atrás una amiga y compañera me comentó: -«No hemos venido a este mundo sólo a comer, dormir y trabajar ¡Hemos venido a evolucionar!»
Me pareció una expresión fantástica y ahí surgió lo del abecedario. Se me ocurrió ir mostrando las distintas fortalezas que nos hacen ser más fuertes, sanos y seres evolucionados. La finalidad es transformarnos en nuestra mejor versión. Os dejo las cuatro primeras y el enlace a mis redes por si queréis leer las demás.
Con la A:
*Abundancia*: cuánto más ponemos de algo, más nos llega. A más alegría, llega más alegría. A más amor, llega más amor. Se trata por tanto de cultivar cosas buenas. Y así tendremos abundancia de todo lo bueno.
Con la B: *Bondad*: para llegar a ella se debe pasar por el camino de la sensibilidad, la simpatía y la empatía. La bondad incrementa el bienestar en diferentes áreas de la vida.
Los niños que crecen siendo capacitados para la bondad se vuelven más altruistas, su capacidad de concentración se ve reforzada y se registra un ligero aumento en su desempeño académico.
Ser bondadoso no quiere decir ser sumiso, ingenuo o sin carácter, al contrario la bondad es característica de personas con energía y optimismo que infunden confianza, cariño y respeto a su alrededor.
Con la C: Calma: ésta es una de mis preferidas. El poder de la calma es inmenso. Nos aporta mesura, serenidad de ánimo, tranquilidad, paz interior, dominio de nosotros mismos y de las circunstancias extremas. La calma es una fuerza poderosa que nos ayuda a encontrar sanas soluciones en los momentos complicados. Y afortunadamente se puede aprender.
Cuando os alteréis poned en práctica estas dos frases: «Si pierdo la calma, pierdo mi poder» o «Cuanta más calma tengo, más poder poseo», y notaréis sus maravillosos efectos.
Con la D: Dedicación: Es la actitud de ser firme en alcanzar un objetivo. Le precede una decisión y le acompaña la perseverancia y la constancia. La dedicación nos conduce al éxito incluso en aquellos propósitos en los que no abundan las ganas.
Muchas cosas buenas de la vida son fruto de la dedicación, como educar a los hijos, aprender idiomas, pintar, tocar un instrumento, la buena amistad, el buen amor… Tarea para hoy: Dedicar tiempo y atención a todo aquello que nos hace bien.
Con la E: Empatía: es la capacidad de ponerse en el lugar del otro. Es una característica de personalidad que resulta muy útil para mantener relaciones saludables y vínculos estables.
Es curioso que es un término muy conocido pero no bien usado ya que suele confundirse con aconsejar, minimizar, compadecernos, corregir… cuando supone escuchar, observar y aceptar, expresando comprensión y respeto, aunque no seamos afines con la otra persona.
La empatía es maravillosa pero debemos cuidar de no ser excesivamente empáticos para no desconectar de nosotros mismos y caer en relaciones poco sanas.

Licenciada en Psicología clínica y experta en Psicopatología y Salud. Especializada en psicooncología y en atención en la enfermedad crónica y aguda.
Colaboradora de la Facultad de Psicología de la Uned.
Realiza talleres para los familiares de pacientes dependientes para el Ayuntamiento de Cádiz, continuando con los de estimulación cognitiva para las personas de mayor edad en la UDP Unión Democrática de Pensionistas y distintos talleres de deshabituación tabáquica y los de salud sexual para enfermos crónicos a través de la Escuela de Pacientes.
Pertenece al grupo de trabajo de Psicooncología del cop de Cádiz. Soy miembro de la SEPO.
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