
Creo firmemente en la amistad, el amor que se le profesa a un amigo puede hacernos sentir verdaderamente felices. La amistad muchas veces no se ve, se oculta de forma sutil, por ejemplo hay amigos que no están físicamente pero se les lleva en el corazón por lo que en su momento nos aportaron y otros que están pero no saben lo importante que son.
También es cierto que hay amistades que van cambiando o evolucionando o que desaparecen, quizás porque ya no aportan nada.
Para el conocido psicólogo Carl Rogers, la amistad es una relación afectiva basada en la comunicación, la comprensión, el apoyo mutuo, el afecto y la armonía entre sus miembros.
Este autor considera cuatro características básicas de una amistad sana:
- Autenticidad, es decir, tiene que expresar claramente el modo de sentir sin máscaras ni reservas.
- Cordialidad, que consiste en aceptar y considerar de forma incondicional sin pretender que los demás hagan lo que uno quiere.
- Empatía, la capacidad de comprender lo que la otra persona siente. A veces no hace falta las palabras.
- Disposición de apertura hacia el otro, de compartir de puertas para afuera.
Solamente puedo quererte como eres y ser tu amigo.»

Licenciada en Psicología clínica y experta en Psicopatología y Salud. Especializada en psicooncología y en atención en la enfermedad crónica y aguda.
Colaboradora de la Facultad de Psicología de la Uned.
Realiza talleres para los familiares de pacientes dependientes para el Ayuntamiento de Cádiz, continuando con los de estimulación cognitiva para las personas de mayor edad en la UDP Unión Democrática de Pensionistas y distintos talleres de deshabituación tabáquica y los de salud sexual para enfermos crónicos a través de la Escuela de Pacientes.
Pertenece al grupo de trabajo de Psicooncología del cop de Cádiz. Soy miembro de la SEPO.
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